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La problemática de la APUESTA ILEGAL: las nuevas casas de apuestas por internet

Cierto es que, para el jugador puro, el poder hacer sus apuestas a través de portales como los de Zeturf o Betfair es una de las mayores alegrías que se les ha podido regalar.
Más aun, el apostador de las carreras de caballos en España es una persona que sobrepasa la media en cuanto a la utilización de Internet. Los años en que La Zarzuela permaneció cerrado, la exigencia de conocer los retirados de última hora, el afán de conocer informaciones privilegiadas a través de foros...... hacen que este sujeto esté abierto a las nuevas tecnologías. Es, sin lugar a dudas, un cliente potencial con grandes posibilidades de enquistarse en dicho mundo.El problema radica en qué aporta dicho mundo al establecimiento y desarrollo de las carreras.
NADA.
Su aportación, hoy por hoy, es nula.
Muchos de estos apostadores lo comparan con las casas de juego de otros países como Inglaterra que son las que de forma considerable patrocinan los premios. Comparar nuestro país con otros es una forma de poner una cortina delante de nuestros ojos para no ver la auténtica realidad.
La solución ante este mal es difícil. De todos es sabido que controlar la red es imposible a no ser que se tomen medidas drásticas como ocurre en EEUU y no precisamente con la apuesta de los caballos.
Sin embargo, existen dos puntos que deberían crear esperanza al mundo del turf nacional. El primero es que la práctica no está muy extendida y organizaciones como Onlae tienen, aunque éste pasa muy rápido, el tiempo suficiente para crear su propio estatus dentro de la apuesta del caballo y que la apuesta ilegal no se haga con el mercado.
El segundo es que gran parte de la comunidad apostante turfista está enamorada de su deporte lo que le hace reticente de la utilización de estas apuestas que no aportan beneficio a su pasión.
Muchos nos preguntamos, ¿por qué no se actúa contra estas empresas ilegales utilizando los derechos de imagen que los propietarios de caballos han cedido al hipódromo?
La aparición de las casas de apuestas en las Comunidades de Madrid y Vasca ahondarán en la problemática de que estas apuestas no redunden en el mundo del caballo. A diferencia de la casa ilegal, éstas si repercutirán en el turf a modo propagandístico. Muchos de sus clientes se interesarán por las carreras al conocer en dichas casas la existencia de esta práctica.
ONLAE es la esperanza para que el dinero apostado se reinvierta en el propio deporte. Para ello, tal como desde los recintos y foros de carreras se pide a gritos, es necesario sacar a la calle la apuesta interna de los hipódromos.
Al mismo tiempo, el gigante de la apuesta española no ha de quedarse sólo en ésto. Si bien es cierto que servirá como freno a la apuesta ilegal de Internet y será una competencia que, a nuestro parecer, vencerá sin problemas a las casas de apuestas, no ha de olvidarse que estará trasladando la apuesta del jugador habitual de los hipódromos a sus despachos. Esto no genera nuevo negocio; simplemente facilita la apuesta al jugador de caballos.¿Y miles de establecimientos han de ponerse a disposición de un juego que es seguido actualmente por un número muy pequeño de clientes? Rotundamente NO.
ONLAE no ha de olvidarse de su público, el habitual, que sustenta sus despachos de apuestas. Es por ello necesario la creación de un juego que se diferencie de los ya existentes en los recintos deportivos y que, a su vez, consiga aunar la curiosidad de esos dos públicos tan diferentes como son el “público ONLAE” y el "público del Turf”

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